jueves, 18 de febrero de 2016

Ciro Gómez Leyva - Anabel billeteaba periodistas para que se callaran la boca

¿Quién mata a los periodistas en México? pregunté aquí el martes, a propósito del asesinato de la veracruzana Anabel Flores Salazar. Corría una versión de que esta mujer de 27 años formaba parte de la estructura criminal en su región, pero el propio Gobernador Javier Duarte pintó otra pista para presentarla como víctima de los criminales por los textos periodísticos que publicaba en Facebook con el seudónimo de Mariana Contreras.

A las horas de que se encontrara el cadáver de Anabel, el martes 9, el dueño del diario veracruzano El Buen Tono, José Abella, aseguró que habían despedido a Anabel meses atrás por sus nexos con la delincuencia. Ayer hablé con él. No imaginaba la dureza de sus afirmaciones.

—Claro que un periodista puede ser malandro —abrió fuego—. Hay muchos periodistas en Veracruz, y muchos en el País, que están bien metidos en la mafia. Pero no se les puede decir, porque parece que chocas con un taxista. Chocas con un taxista y te llegan 50.







Dan T - Retrato de un cerdo

Yo no fui
Durante mucho tiempo se dijo que la carne de cerdo era mala para la salud. Hoy te puedo decir, sin temor a equivocarme, que lo más dañino para la salud de México no es la carne de cerdo, sino la mentalidad de cerdo.

Y por cerdo me refiero no a los animalitos que hacen oinc, oinc, sino a los que mandan a sus guaruras a golpear funcionarios públicos por el simple hecho de que estos están haciendo su chamba. Y si quieres que sea más específico, esta columna va dedicada al empresario mexiquense Raúl Libien Santiago, el más depurado ejemplo de la mentalidad de cerdo.

El susodicho tiene mucha lana y, por lo mismo, cree que es dueño de la calle y de la vida de sus empleados. Y el otro día se topó con alguien que no le tiene miedo: Arne Aus den Ruthen, el “city manager” de la Delegación Miguel Hidalgo. Se trata de un expanista que debe estar un poco loquito, pues está haciendo el trabajo que ningún otro político se había atrevido a hacer: poner orden en las calles.








Carlos Ramírez - El Papa, la clase política y el retroceso histórico

Preocupados más por salvar su alma pecadora que por salvar al Estado, la clase política que capitalizó a su favor la visita del Papa Francisco, no entendió el efecto contrahistórico de sus acciones porque destruyó una de las características fundamentales del Estado laico: La secularización de la sociedad.

Los liberales juaristas del siglo no buscaron la anulación de la Iglesia católica que tanto daño hizo --guerras civiles y un imperio importado-- sino que su objetivo final fue doble: Separar a la Iglesia del Estado y sobre todo introducir la ciudadanía cívica que la religión había anulado.

La postración de funcionarios y políticos ante la autoridad religiosa del Papa Francisco, fue un paso hacia la destrucción de la ciudadanía y el fin de la secularización de la sociedad.








Ricardo Alemán - ‘La Gaviota’ y el Papa

Muchos criticaron las apariciones públicas de Angélica Rivera en la reciente visita del Papa a México. Que si el video donde Luis Videgaray escatima el saludo a la primera dama, que si el vestido claro en contraste con el blanco de Francisco, que si…

Pocos vieron que uno de los momentos más emotivos y que arrancó una lágrima del Obispo de Roma fue la visita al Hospital Infantil de México Federico Gómez, evento que coordinó y en el que se empeñó directamente la señora De Peña. Más aún, en el itinerario original de la visita del Papa no aparecía la visita al hospital.

Pero resulta que desde el inicio del Gobierno federal, Angélica Rivera dedica buena parte de su atención como primera dama al “Federico Gómez”, en particular a los enfermos de cáncer. Y es que el nosocomio es referente de la atención infantil en México, en donde el 70% de los atendidos proceden del resto de los estados del país; se brindan 6 mil consultas y 3 mil cirugías de alta especialidad al año y se atienden 14 especialidades médicas.







Jorge Zepeda Patterson - La resignación como mala palabra

Jorge Bergoglio es más hábil de lo que parece y su visita a México lo demuestra. No sucedió lo que muchos habríamos deseado; no hizo de su gira una cruzada incendiaria en contra de los poderosos, ni buscó poner fin a los vicios enquistados de la Iglesia en nuestro país. No se reunió con víctimas de curas pederastas ni denunció a sus victimarios; tampoco accedió a verse con los padres de los 43 estudiantes desaparecidos.

Quiero pensar que el Pontífice sabe que para dejar huella su papado debe ser longevo; algo que no sucederá si se pone a sacudir el árbol del alto clero para tumbar a las manzanas podridas. El último que intentó sacar a los fariseos y a los falsos sacerdotes del templo fue crucificado aún joven, como bien se sabe.








Lorenzo Meyer - Un relación difícil

"El discurso papal resuena tanto en México por dos razones: la conflictiva historia de las relaciones iglesia-estado y la fragil legitimidad de quienes ejercen el poder" 

Lorenzo Meyer










 

Raymundo Riva Polacio - Reconciliación imposible

El Papa Francisco oró este miércoles por la misericordia en el penal de Ciudad Juárez, que ha sido crisol de todos los padecimientos sociales mexicanos. La misericordia que tiene en el perdón y la reconciliación sus dos pilares. Fue la coronación de las plegarias de Francisco que a lo largo de su viaje por México ha pedido por el reencuentro de los mexicanos con los mexicanos. El jefe de la Iglesia Católica sabía que llegaría a un México que vive una ruptura social. Desde hace dos años ocho obispos de Michoacán –a uno de ellos, Alberto Suárez Inda, lo haría cardenal- difundieron un mensaje a los michoacanos que la reflejaba.

Fue el primero de dos documentos que emitieron en 2013, donde la conclusión cuando terminaba el primer año del Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, era que “la sociedad (estaba) a tal grado contaminada por la corrupción… que cualquier esfuerzo de querer mejorar las cosas, está condenado al fracaso”. El diagnóstico de la realidad michoacana, era la radiografía de un país que, desde entonces, su sociedad ha vivido una exacerbación creciente. Francisco habló de los males en esta gira, pero si la reconciliación ese año era una urgencia, hoy es una utopía.








José Woldenberg - Iglesia y sexualidad

La tensión mayor -la zona de desencuentros más amplia- entre la Iglesia Católica y franjas relevantes de la sociedad

... es la que tiene que ver con asuntos de salud y/o sexualidad. Y es que eso que llamamos modernidad está procesando con nuevos códigos temas que desbordan los corsés tradicionales. Se trata de asuntos que hoy pueden resolverse alejados de las recetas añejas gracias a los avances científicos y a una actitud más flexible -más comprensiva- que se ensancha gracias a la secularización imparable de las sociedades. (Esa dimensión contrasta con otras en las que la Iglesia ha intentado "ponerse al día", como la encíclica Laudato si en relación al cambio climático). Veamos.





Lea la columna completa aquí http://www.criteriohidalgo.com/a-criterio/iglesia-y-sexualidad







Sergio Sarmiento - Tasas arriba

"Una definición de economista es alguien que ve que algo ocurre en la práctica y se pregunta si funcionará en la teoría."

Ronald Reagan

Muchos amigos, y algunos no tan amigos, me habían venido cuestionando durante meses sobre la posición que mantenía públicamente de que había llegado el momento de que el Banco de México elevara su tasa de interés. ¿Por qué un periodista, con título universitario de filósofo y no de economista, pretendía saber más que los especialistas del Banco de México y la Secretaría de Hacienda, quienes insistían que no había razón para subir el tipo de interés, por lo menos no mientras no lo hiciera la Reserva Federal de los Estados Unidos?





Leído en http://www.criteriohidalgo.com/a-criterio/tasas-arriba







Ambrose Bierce - Una tumba sin fondo

Ambrose Bierce  ( 1842 -1914 )
Una tumba sin fondo

Me llamo John Brenwalter. Mi padre, un borracho, logró patentar un invento para fabricar granos de café con arcilla; pero era un hombre honrado y no quiso involucrarse en la fabricación. Por esta razón era sólo moderadamente rico, pues las regalías de su muy valioso invento apenas le dejaban lo suficiente para pagar los gastos de los pleitos contra los bribones culpables de infracción. Fue así que yo carecí de muchas de las ventajas que gozan los hijos de padres deshonestos e inescrupulosos, y de no haber sido por una madre noble y devota (quien descuidó a mis hermanos y a mis hermanas y vigiló personalmente mi educación), habría crecido en la ignorancia y habría sido obligado a asistir a la escuela. Ser el hijo favorito de una mujer bondadosa es mejor que el oro.

Cuando yo tenía diecinueve años, mi padre tuvo la desgracia de morir. Había tenido siempre una salud perfecta, y su muerte, ocurrida a la hora de cenar y sin previo aviso, a nadie sorprendió tanto como a él mismo. Esa misma mañana le habían notificado la adjudicación de la patente de su invento para forzar cajas de caudales por presión hidráulica y sin hacer ruido. El Jefe de Patentes había declarado que era la más ingeniosa, efectiva y benemérita invención que él hubiera aprobado jamás. Naturalmente, mi padre previó una honrosa, próspera vejez. Es por eso que su repentina muerte fue para él una profunda decepción. Mi madre, en cambio, cuyas piedad y resignación ante los designios del Cielo eran virtudes conspicuas de su carácter, estaba aparentemente menos conmovida. Hacia el final de la comida, una vez que el cuerpo de mi pobre padre fue alzado del suelo, nos reunió a todos en el cuarto contiguo y nos habló de esta manera:

-Hijos míos, el extraño suceso que han presenciado es uno de los más desagradables incidentes en la vida de un hombre honrado, y les aseguro que me resulta poco agradable. Les ruego que crean que yo no he tenido nada que ver en su ejecución. Desde luego -añadió después de una pausa en la que bajó sus ojos abatidos por un profundo pensamiento-, desde luego es mejor que esté muerto.